Tabla de contenido:
- Dinero y miseria
- Deja ir los sentimientos impulsados por el dinero
- 1. Reconsidere los mensajes monetarios internos.
- 2. Reflexione sobre su propia abundancia.
- 3. Recuerde que el dinero es una herramienta.
- 4. Aprenda a utilizar correctamente la herramienta.
- 5. Realice actividades agradables y asequibles.
Foto de Sharon McCutcheon en Unsplash
Los humanos le dan significado al dinero. Lo usamos como métrica clave de la vida para el éxito. Igualamos seguridad con activos y libertad con el tamaño de nuestra cartera. Le damos poder al dólar conectándolo con nuestro valor propio. Y luego nos preguntamos por qué tiene tanto impacto en nuestros sentimientos.
Podemos entender que los activos financieros no son la respuesta a la autosatisfacción, pero todavía nos cuesta deshacernos del impacto que el dinero tiene en nosotros. Le aplicamos significado, equiparando seguridad con activos y libertad con el tamaño de nuestra cartera.
El dinero, como objeto, no significa nada, entonces, ¿cómo puede causar fuertes sentimientos de envidia, miedo y vergüenza? Nos hemos programado para poner el dinero al frente y al centro, para verlo como la base del éxito, la seguridad y la libertad. De hecho, la riqueza es lo suficientemente importante como para que casi el 25% de las personas la enumeren como el significado de la vida, según los datos del Pew Research Center. Para recuperar nuestras emociones, necesitamos romper la conexión entre el dinero y la felicidad.
Dinero y miseria
El dinero es la principal causa de estrés para el 44% de las personas, según una encuesta de Northwestern Mutual. Las personas que dan valor emocional al dinero corren el riesgo de tener problemas cada vez que experimentan una transición de vida o enfrentan un desafío significativo. A medida que aumenta el estrés, cualquier pequeño cambio en las circunstancias financieras los hará sentir peor. Es un círculo vicioso.
Cuando los activos financieros están ligados a nuestro bienestar psicológico, tenemos problemas para desconectarlos. Años de este comportamiento de autosabotaje pueden resultar en dificultades de memoria, problemas de resolución de problemas y disminución de la estima. Y debido a que dejamos que el dinero afecte nuestras emociones, no podemos encontrar una salida. Un simple desacuerdo con su jefe podría adquirir proporciones catastróficas bajo este tipo de coacción mental.
La tristeza y la ira también pueden llevar a compras impulsivas y arriesgadas. Un investigador de la Universidad de Harvard descubrió que las personas gastan más cuando están molestas. Hay una razón por la que la "terapia de compras" es más que un adagio: las personas que se involucran en gastos emocionales tienen como objetivo mejorar su estado de ánimo. Desafortunadamente, estos hábitos y comportamientos no abordan la causa raíz del problema.
Deja ir los sentimientos impulsados por el dinero
Cambiar tu forma de pensar sobre el dinero no es fácil. Después de todo, la asociación entre dinero y poder no es lógica, es emocional. Considere evaluar su forma de pensar desde una perspectiva psicológica. En nuestra firma, hemos acuñado una filosofía llamada Behavioral Wealth Management ™. Nuestro objetivo es ayudar a las personas a tomar decisiones acertadas en lugar de decisiones precipitadas.
Es posible que se sorprenda de la frecuencia con que las personas con mucho dinero todavía se sienten sumidas en la infelicidad y la desilusión. Las personas ricas no son más felices por naturaleza; los impulsores clave de la felicidad no están relacionados con motivadores extrínsecos como el dinero. Más bien, la felicidad se puede encontrar en actividades que exigen nuestra completa atención o en las relaciones estrechas que se basan en la confianza. Se puede encontrar en la amistad, la familia, los pasatiempos y las creencias. Sin un propósito personal, una persona "rica" será tan infeliz como una persona "pobre".
Es hora de darse cuenta de que la felicidad no está relacionada con el prestigio fiscal. No importa cuánto ganemos o cómo sean nuestras cuentas bancarias, deberíamos encontrar satisfacción en otras influencias.
He aquí cómo reclamar cómo te hace sentir el dinero:
1. Reconsidere los mensajes monetarios internos.
Evalúe cómo piensa sobre el dinero. ¿Toma decisiones instintivas? ¿Pones demasiado peso en el dinero? Es posible que tenga una mentalidad tóxica que solo lo lleve al estrés y a malas decisiones financieras. Realinee la forma en que valora el dinero con sus estándares de felicidad y autorrealización.
2. Reflexione sobre su propia abundancia.
En lugar de pensar en lo que no tiene, considere lo que hace. No reflexione sobre los pocos que tienen más, sino sobre la gran mayoría con menos. Una vez que tenga una nueva perspectiva, evalúe su abundancia en los otros cinco elementos de la riqueza: tiempo, talentos, sabiduría, redes y cuerpo y mente. Aunque muchos estadounidenses definen la riqueza con signos de dólar, el 72% cree que la forma en que viven es más valiosa.
3. Recuerde que el dinero es una herramienta.
Como una herramienta, el dinero tiene un propósito. Se usa un martillo para clavar clavos y el dinero se usa para mejorar vidas. La sociedad puede decirte que la felicidad se encuentra en la cantidad de cosas que posees, pero la verdad es que la alegría es el resultado de muchos componentes que se cruzan. Por supuesto, es bueno vivir cómodamente y disfrutar de las extravagancias, pero el dinero no es lo más importante.
4. Aprenda a utilizar correctamente la herramienta.
Las herramientas requieren formación. Nadie espera que un adolescente conduzca un automóvil sin problemas en su primer intento, por lo que nadie debe esperar manejar el dinero perfectamente desde el principio. Si tiene hijos, haga del proceso de educación financiera una experiencia familiar. Al enseñarle a su familia cómo ver la riqueza, se asegurará de que las generaciones futuras comprendan lo que realmente importa. No desea que la riqueza de su familia desaparezca después de tres generaciones, como lo hace el 90% de otras fortunas familiares.
5. Realice actividades agradables y asequibles.
Concéntrese en participar en actividades significativas que no requieran mucho dinero. Tome un café con un amigo, sea voluntario donde marcará la diferencia o pase tiempo explorando la naturaleza en una caminata por la tarde. Olvidar el dinero por un tiempo te afloja.
¿Se siente listo para desconectarse de sus emociones centradas en el dinero? Tómalo día a día. Muy pronto, mirarás hacia atrás y te preguntarás por qué dejas que un signo de dólar te estrese.
© 2020 David Geller